Desde mediados de la década de los años ’70, los ciudadanos de San Juan de la Maguana han soñado con la idea de acortar la distancia de viaje entre esa importante ciudad y Santiago de los Caballeros, incluyendo el resto del Cibao dominicano, fruto de que hasta ahora, para viajar desde San Juan hasta Santiago deben hacerlo pasando por Santo Domingo, lo que alarga el trayecto hasta unos 350 kilómetros que deben ser recorridos en 5 horas de pesado y aburrido viaje.
Diferentes gobiernos han intentado iniciar la construcción de la reclamada carretera desde San Juan hasta Santiago, conectando con la ruta que va desde la presa de Sabaneta hasta donde hoy está la presa de Monción, proyecto que siempre hemos objetado, y cada vez con mayores y válidas razones, porque afectaría la flora y las aguas de las áreas de amortiguamiento de los parques nacionales José del Carmen Ramírez, Armando Bermúdez y Nalga de Maco, desestabilizaría taludes y sedimentaría los embalses de ambas presas.
Este proyecto carretero ya fue desestimado durante el gobierno de Antonio Guzmán, cuando la presa de Sabaneta estaba terminada, y la presa de Monción estaba en proyecto, pero no estaba construida y dando el importante servicio que hoy da al acueducto de la Línea Noroeste. Hoy el escenario es peor que 32 años atrás.
Pero la llegada a la Presidencia de la República del Lic. Danilo Medina, nativo de San Juan, ha hecho renacer en los sanjuaneros la idea de que ahora será cuando se construirá la anhelada carretera a Santiago, y hasta se dice que el Presidente Medina coincide con la idea de abrir esa ruta, y que ya se adelantan algunos estudios de factibilidad preliminar.
Pero la verdad es que esta carretera no saldría a Santiago de los Caballeros, como siempre se ha dicho para timar a la gente, sino a Monción-El Rubio, y desde Monción usted tendría que llegar a Mao, luego a Esperanza, luego a Navarrete y finalmente a Santiago, es decir, la carretera no saldría a Santiago, sino a la Línea Noroeste, y el comercio entre San Juan y el Noroeste no es significativo.
Quienes defienden la carretera dicen que no saldría a Monción, sino a El Rubio, una comunidad rural localizada a unos 12 kilómetros al sureste de Monción, y que desde ahí conectaría con San José de las Matas y Santiago, pero luego de hacer una nueva carretera de montaña desde San Juan hasta El Rubio, habría que reconstruir toda la carretera desde El Rubio hasta San José de las Matas, porque es un camino vecinal en muy mal estado, y luego mejorar la carretera hasta Santiago, y esa es una parte que no se dice de este «gancho ingenieril», del cual Danilo debe cuidarse, para no caer en él, como cayó Leonel en el costoso gancho del Metro.
Vistas así las cosas, la ruta San Juan a Santiago terminaría siendo una carretera de unos 160 kilómetros, con un costo económico superior a los 350 millones de dólares, y un costo ambiental posiblemente superior a los 1,500 millones de dólares, porque en poco tiempo podría sedimentar las presas de Sabaneta y Monción, dejando sin agua al canal José Joaquín Puello y al acueducto de la Línea Noroeste, y dejando de producir unos 90 megavatios de energía limpia y barata.
Los daños reales a los acueductos y a los canales de riego de San Juan y de la Línea Noroeste serían muy superiores a los escasos beneficios de esta absurda carretera.
La opción ideal para conectar a San Juan con todo El Cibao es ampliar la carretera que une a Padre Las Casas y Constanza, por la ruta de El Guayabal, pues desde Padre Las Casas hasta El Guayabal hay una carretera mala, de 15 kilómetros de longitud, y desde El Guayabal hasta Constanza existe otra carretera mala, de 35 kilómetros de longitud, ambas transitables en vehículos de doble tracción, estimándose que el costo real de ampliación y adecuación de esta ruta sería de unos 90 millones de dólares, porque podemos reducirla a 45 kilómetros eliminando curvas innecesarias.
Desde Constanza ya tenemos dos costosas carreteras nuevas que conectan con la autopista Duarte y con Jarabacoa, y desde ahí conectamos con todo el centro del país, incluyendo Bonao, San Francisco, Salcedo, La Vega, Santiago, Moca, y todo El Cibao y la costa Norte, moviendo más pasajeros, más productos comerciales y más eco turistas de montañas, al tiempo de beneficiar a San Juan, Barahona, Azua, Bahoruco e Independencia.
Esta carretera eco turística San Juan-Padre Las Casas-El Guayabal-Constanza-El Cibao, tendría mínimos conflictos ambientales con la presa de Sabana Yegua, acortaría a la mitad las distancias desde el Suroeste hacia El Cibao y costaría apenas el 25% de lo que costaría la carretera desde San Juan a Monción-El Rubio, lo que indica que por la ruta de Monción se beneficiarían los contratistas y por la ruta de Constanza se beneficiarían los ciudadanos, el gobierno y el país.
Con todas esas ventajas comparativas, si Danilo Medina desea que sus compueblanos sanjuaneros viajen hacia El Cibao por una ruta eco turística, corta y bella, su mejor opción es iniciar de inmediato la ampliación de la carretera Padre Las Casas-El Guayabal-Constanza, y se ganaría el aplauso de todo el país.
Yo apoyo esa importante carretera eco turística, y espero que todo el país también la apoye.
