Jerusalén, Israel.-Israel se preparaba para despedir con un homenaje al último de sus padres fundadores, el premio Nobel de la Paz, Shimon Peres, quien falleció ayer a sus 93 años de edad.

El cuerpo del expresidente israelí será llevado hoy al parlamento en Jerusalén, donde permanecerá durante 12 horas para que los israelíes puedan despedirse del político laborista, impulsor de los acuerdos de Oslo y también padre del programa nuclear israelí.

Peres será enterrado el viernes en el cementerio nacional de Monte Herzl, a cuyo sepelio asistirán líderes de todo el mundo que buscan expresar su cariño a un político que consideraban como un amigo, al que reconocen su tenacidad, su visión y la valentía que mostró al impulsar un proceso de paz con los palestinos.

Israel enfrenta un complicado rompecabezas para organizar un funeral al que asistirán líderes como los presidentes de Estados Unidos, Francia, Alemania, el príncipe Carlos de Inglaterra y Bill Clinton, quien supervisó la firma en Washington de los acuerdos de Oslo entre israelíes y palestinos. Desde hoy, todas las banderas israelíes ondearán a media asta en señal de duelo.

Peres falleció mientras dormía en un hospital donde fue recluido tras haber sufrido dos semanas antes un accidente vascular cerebral, di jo a la AFP su médico personal y yerno, Rafi Walden. “Nos dejó sin sufrir”, agregó.