La campaña de vacunación de la Unicef, en colaboración con el Gobierno haitiano y los socios internacionales (OMS, Cruz Roja…) ha comenzado.

Son cerca de 500.000 niños que se vacunará contra el tétanos, rubéola, sarampión, difteria y la tos ferina. La Unicef juzga esta operación esencial para evitar la propagación de enfermedades mortales, una verdadera amenaza para los niños que viven en zonas de urgencia, más concretamente en los campos donde la promiscuidad reina. En una primera fase, la campaña afectará a aproximadamente 200.000 niños viviendo  en los campos, hospitales y otros lugares de  alojamiento provisionales.

La segunda fase se dirigirá a todos los niños menores de 7 años, en el  conjunto de las zonas afectadas por el seísmo. Las zonas contempladas son: la capital y los municipios vecinos, Petit-Goâve, Grand-Goâve y Léogâne, en el departamento del  Oeste, así como Jacmel, en el departamento del Sureste. Además de la vacunación, los niños recibirán de la vitamina A. luego, la campaña de vacunación se dirigirá a los adultos presentes en las zonas afectadas por el seísmo del 12 de enero, ellos se vacunará contra la difteria y el tétanos.

Las vacunas, jeringuillas, equipamientos técnicos así como la conservación de las vacunas están garantizadas por la  Unicef. Los socios internacionales proporcionan medios logístico, recursos humanos así como un apoyo financiero. El Gobierno haitiano a través del Ministerio de Salud Pública y Población (MSPP) garantiza la coordinación in situ en colaboración entre otras organizaciones.

La dirección nacional del Programa Ampliada de Vacunación (PEV), de la dirección sanitaria del  Oeste, de las oficinas comunales y del Comité nacional de movilización social.

Cerca del 40% de los haitianos tienen menos de 14 años. Antes del seísmo del 12 de enero, Haití presentaba la más fuerte tasa de mortalidad infantil de la región América y Caribe.