Idóneos sin título

Idóneos sin título

Idóneos sin título

José Armando Tavarez

Revisando algunos informes y estudios internacionales, descubrí una frase interesante que inmediatamente captó mi atención académica: idóneos sin título. Dicha afirmación hace referencia a personas que poseen las competencias y habilidades para ocupar un puesto laboral con buen desempeño sin poseer un título universitario.

Después de hacer la correspondiente reflexión sobre dicha categorización académica y laboral, llegamos a las siguientes conclusiones.

En primer lugar pienso que en el mundo actual, caracterizado por grandes avances científicos y tecnológicos, se está valorizando cada vez más lo que las personas saben hacer y resolver en el ámbito de trabajo.

Los títulos y certificaciones académicas siguen siendo importantes pero en un mundo cada más competitivo, se espera que una persona cumpla con altos estándares de desempeño más que poseer dos o tres títulos de maestría.

Por otro lado, esta nueva realidad obliga a universidades y demás instituciones académicas a un proceso de replanteamiento de su rol en la sociedad.

En un futuro no muy lejano, los departamentos de recursos humanos estarán modificando y adaptando sus procesos de selección y reclutamiento, haciendo posible que las personas ocupen los puestos requeridos sin necesidad de tener un título universitario. Los procesos de certificación de competencias se harán cada vez más sólidos y populares.

Por último, una posible vía de innovación frente a estos nuevos cambios puede consistir en la flexibilización de las legislaciones vigentes y un cambio de paradigma educativo.

Por ejemplo, las carreras universitarias tendrán que ser más cortas y experimentar un proceso de actualización curricular más frecuente, contando con una participación activa de los actores interesados en la formación de buenos profesionales.El mundo cambió.

Las empresas tienen nuevas formas de captar y retener talentos.

Las instituciones académicas deben responder a estos nuevos desafíos. Ha llegado la hora de la innovación radical en la formación así como en la habilitación de competencias laborales.



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