La policía encontró a una pareja de ancianos que había fallecido varios meses atrás y se estima que el hijo, que residía en el mismo lugar, convivió con los cadáveres de sus padres durante ese tiempo.
Los ancianos, de unos 80 años, se encontraban con sus cuerpos en estado de descomposición.
Allí también se encontró al hijo de ambos, que presentaba heridas viejas en su cuerpo y que confirmó haber vivido allí durante los últimos meses.