Hasta siempre Ramón

Hasta siempre Ramón

Hasta siempre Ramón

Dilenia Cruz

Cada día es más frecuente ver notas, en las redes sociales, dando gracias o solicitando favores de parte del Creador o a algún ser querido que ha partido. No sé si esas personas saben algo que yo no sé.

Lo cierto es que desde que la humanidad existe, siempre ha realizado rituales de comunicación con vivos y muertos en pos de completar conversaciones y etapas que quedaron inconclusas.

Hoy es unos de esos días. Aunque más que comunicarme con un ser querido, prefiero testimoniar la grandeza humana de un gran amigo, hoy ausente, Ramón Reyes.

Dicen que cuando alguien muere, todos aseguran que era bueno. Sin embargo, empezaré por asegurar que mi amigo Ramón llevaba su carga de imperfecciones. Resabioso y contestatario; qué más se puede esperar de un periodista y abogado serio y comprometido. Hablaba de frente y con lo que consideraba la verdad y la justicia.

Cuando nuestros caminos se juntaron “En Primera Fila”, gracias a don Mario Rivadulla y Alex Jiménez, no imaginé que lo que iniciaba como una relación laboral con un profesional a quien entendía debía admirar y valorar por su experiencia y sus años, con el transcurrir del tiempo se convertiría en una relación de gran amistad que le regalaría el “abuelito” perdido a mi hijo menor.

Hay personas que entran a nuestras vidas por una razón aparentemente transitoria, pero que se quedarán aun cuando ya no están.

Ramón Reyes permanecerá en la memoria de mi alma como “un tizón encendido que no se puede apagar”, por la honestidad, solidaridad, afabilidad y cariño genuino entregado en su trayectoria.

Mi admiración, respeto y cariño para quien más que amigo tuvo la grandeza de un padre.
Hasta siempre Ramón.



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