La subsecretaria adjunta Roberta S. Jacobson participa en la reunión de los jefes de Misión de Estados Unidos en el Caribe, celebrada hoy y mañana en Barbados.

La funcionaria norteamericana escribió para EL DÍA  sobre   los nexos que han prevalecido entre la nación norteamericana con los demás países de la región, por lo que se han destinado 203 millones de dólares en un plan de seguridad ciudadana para reducir la violencia y el tráfico ilícito.

La funcionaria resalta que ya se observan los resultados de esta alianza. A continuación el texto íntegro:  

Los Estados Unidos y el Caribe disfrutan de amplios lazos políticos, económicos, culturales y familiares.

Compartimos un compromiso con los derechos humanos y los valores democráticos, reflejados en las elecciones libres y justas que se celebran tanto en los Estados Unidos como en el Caribe.

  También compartimos un compromiso en la lucha contra la corrupción y en la diversificación de nuestras economías para compartir más ampliamente los beneficios del crecimiento económico.

El compromiso de alto nivel es importante para nuestra alianza.  

En cada una de las últimas dos Cumbres de las Américas, el presidente Barack Obama se reunió con los líderes del Caribe con quienes conversó sobre cómo fortalecer la importante amistad existente entre los Estados Unidos y la región del Caribe. 

Asimismo, la secretaria Hillary Clinton ha realizado diez viajes a cinco naciones del Caribe, y otros miembros del gabinete -incluyendo la Secretaria de Seguridad Nacional Janet Napolitano, y el Procurador General Eric Holder-  han visitado la región.

Funcionarios estadounidenses, de diversas áreas del Gobierno, trabajan muy de cerca con sus contrapartes caribeños todos los días para continuar avanzando en nuestra agenda compartida.

La inversión

El punto más luminoso de nuestro compromiso es la Iniciativa de Seguridad para la Cuenca del Caribe, a través de la cual hemos comprometido US$203 millones para mejorar la seguridad ciudadana, reducir la violencia y combatir el tráfico ilícito.

La Iniciativa ha ido creando lazos a través de un enfoque global que abarca todas las áreas del gobierno, y con el sentido de responsabilidad compartida. 

Ya estamos viendo los resultados: por ejemplo, las interceptaciones de cargamentos ilícitos de drogas han alcanzado niveles nunca antes visto, y las tasas de homicidio en varios países han caído de manera sustancial.

Ola criminal

En 2011, las islas de St. Kitts y Nevis confrontaban una ola criminal fuera de control y una de las tasas mundiales más altas de homicidio per cápita. 

Trabajando con asesores legales auspiciados por el Gobierno de los Estados Unidos, el Gobierno de St. Kitts, la policía y el Ministerio Público introdujeron nuevas políticas y prácticas que produjo una caída de dos cifras en la tasa de crímenes violentos, lo que conllevó a comunidades más seguras.

Este es un ejemplo del fuerte apoyo que ha ofrecido los Estados Unidos, trabajando mano a mano con las naciones del Caribe con el objetivo de enfrentar juntos los retos futuros.

Nuestro compromiso también tiene una dimensión económica importante. 

El intercambio comercial y la inversión se siguen fortaleciendo, y las compañías caribeñas se han beneficiado de las preferencias comerciales estadounidenses generando empleos y desarrollo en la región. 

Conjuntamente con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el sector privado, estamos seleccionando a los finalistas para el Mercado de Ideas del Caribe, lo que le permitirá a la diáspora y a los empresarios del país anfitrión iniciar nuevos proyectos.

Estamos incrementando la participación económica de la mujer a través de iniciativas como la Red Empresarial de Mujeres.

Más aún, estamos comprometidos con el mejoramiento de las oportunidades educativas a través de programas manejados por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional , así como el programa “La fuerza de 100,000 en las Américas”, iniciativa del presidente Obama para reforzar los intercambios educativos entre los Estados Unidos y América Latina y el Caribe por 100,000 estudiantes en cada dirección.

Estamos especialmente enfocados en incrementar la educación y las oportunidades de trabajo para los jóvenes. 

Bajo la Iniciativa, establecimos iniciativas a lo largo y ancho de la región para ayudar a jóvenes en situaciones de alto riesgo. 

El más reciente fue un programa de cinco años valorado en US$20 millones, el cual beneficiará a 100,000 jóvenes en riesgo en la República Dominicana.

En cuanto a la energía y el medio ambiente, estamos mejorando la capacidad técnica y llevando a cabo el trabajo inicial para la inversión bajo la Alianza de Energía y Clima de las Américas (ECPA, por sus siglas en inglés) y la Iniciativa “Connect 2022”. 

La Alianza le ha permitido a Surinam utilizar la generación energética sostenible y proteger su gran riqueza ecológica.

Asimismo, trabajamos para fortalecer los sistemas de salud en catorce países a través del Plan de Emergencia del Presidente para VIH/Sida.  

En Guyana, donde hemos invertido US$175 millones en los últimos diez años, la tasa de prevalencia del VIH ha caído en más de la mitad.

Estos ejemplos ilustran nuestra colaboración con los líderes y ciudadanos del Caribe en ayudar a sus respectivas comunidades, mejorar sus vidas, e integrar nuestras naciones.

Los Estados Unidos continuará fortaleciendo las alianzas con los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil de la región para alcanzar éxitos aún más grandes.