El mejor regalo
La fecha de cumpleaños para muchas personas es de gran importancia en su vida. Yo, por ejemplo, tengo grandes recuerdos de cumpleaños, llega a mi memoria un día que mi papá me regaló algo que me trajo mucha felicidad, que fueron unos patines, ¡wuoo!, fue espectacular.
Esos patines transformaron mi vida, claro, también produjeron lesiones en mi cuerpo, pero fue el mejor regalo material que he recibido.
Otro regalo que también ha llegado a mis manos ha sido la gracia de Dios, esa sublime gracia que vino a darme la felicidad en abundancia, como dijo Pablo, la gracia irresistible cambió mi corazón. Amigo, cuando la Gracia viene a la vida de una persona ella se encarga de cambiar todo lo que no conviene a su alma y por ella podemos entrar a la presencia de Dios en libertad, para estar cerca de Él.
No importa en la condición que el ser humano pueda estar, ahí está la eterna gracia de Dios.
Es ta es un regalo del Señor para los hombres, por más creyente que sea la persona o una que no crea, todos necesitamos esa misericordia inmerecida, que puede aliviar las almas más oscuras. La gracia viene a dar luz. Podemos ser árbol seco y sin fruto, su gracia produce savia a nuestras ramas para que circulen ríos de agua viva.
Algunos nos podemos rebelar a esta gracia, pero tarde o temprano ella te cargará, porque somos de Él, no importa donde estemos, Él nos tocará con su amor y misericordia.
De acuerdo a Tito 2:11-12, la gracia de Dios se ha manifestado para salvación de todos los hombres. Jesús declaró que Dios llama a los hombres por medio de la enseñanza (Juan 6:44-45). Todos pueden participar de la gracia de Dios obedeciendo su evangelio (2Pedro 3:9; Romanos 6:16-18; 6:1-4). Nunca es tarde para recibirlo en nuestro corazón.
Decora tu rincón: (Hebreos 4:16) Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.