Los alimentos ricos en grasa y en colesterol pueden aumentar el peligro de un ataque cardíaco si se comen en exceso, y por tanto deberían comerse con moderación.

En cambio para cuidar nuestra salud, debemos escoger piezas de carne magra (baja en grasa: pollo, pavo y pescado), moderando el consumo de huevos (3 veces por semana), y quizás empleando algo de leche descremada en lugar de leche entera, es posible aprovechar algunas de las cualidades nutricionales de esos alimentos, como vitaminas.

Una dieta sana es posible, aunque el éxito en la planificación de la comida depende de muchos factores, entre estos las costumbres familiares, los hábitos alimenticios, las influencias culturales y el tiempo disponible para preparar la comida.

Una mejor alimentación la podemos obtener de los frutos secos, los granos, los cereales integrales y la cantidad de fibras que debemos consumir diariamente. Las frutas juegan un papel muy importante en la alimentación sana.
Cuidar la salud y proteger nuestro corazón es una tarea del día a día, los 360 días del año.

Ragú de berenjenas

Ingredientes
3 berenjenas medianas
1 cebolla picada en brunoise
1 diente de ajo picado
1/2 Kg de tomates picados
100 gramos de aceitunas (sin semillas)
Aceite de oliva extra virgen
Orégano al gusto

Preparación:

Pelar y cortar las berenjenas en cubos pequeños.
Remojarlas por una hora.

Enjuagarlas. Reservar.
En una olla, sartén grande o cacerola calentar un chorro de aceite.
Incorporar los trozos de berenjena, el ajo picado, la cebolla y el tomate picado.

Sazonar con sal, pimienta yorégano la preparación.

Saltear por 2 minutos y añadir las aceitunas. Tapar la preparación y cocinar a fuego lento hasta que los ingredientes estén tiernos (15 o 20 minutos).

Puede añadir queso parmesano rallado o queso mozzarella. Sirve como salsa o ragú para acompañar cualquier tipo de picadera o para una entrada.