El Plan de Titulación

Sin mucha alharaca el Gobierno lleva a cabo una verdadera revolución social, al dotar de su título de propiedad a miles de familias que usufructuaban tierras o propiedades del Estado.

La mayoría de los beneficiarios hasta ahora son agricultores, parceleros y ocupantes de pequeñas porciones de terrenos rurales, quienes han pasado a convertirse en agentes de crédito y así obtener financiamientos para sus actividades productivas.

De igual manera la titulación eleva el valor de la propiedad, lo cual se convierte en un patrimonio familiar.

Las ventajas son múltiples y tienen un impacto directo en esas familias que la casi generalidad son de estratos humildes.

Esperamos que el siguiente paso sea la titulación de los propietarios de apartamentos y viviendas construidas por el Gobierno para los diferentes planes habitacionales.

Decenas de miles de familias adquirieron estas unidades habitacionales a través de Bienes Nacionales o el Instituto Nacional de la Vivienda, pero los años han pasado sin que se regularice su estatus de propietarios con la entrega de los títulos correspondientes.

El Plan de Titulación lleva la esperanza de que estas familias también puedan obtener sus títulos de propiedad con los consecuentes beneficios que eso conlleva.

Estamos frente a una acción trascendente.