En el año 1936, aproximadamente, el Presidente Rafael Leonidas Trujillo por complacer las ambiciones de sus hijos decidió construir un parque infantil, el cual llevaría el nombre de «Ramfis», su hijo mayor. Dicho parque se construyó con una piscina, una pista de patinaje y juegos infantiles que consistían en trompos, sube y baja, columpios, y otros juegos para la diversión de los niños.
Luego en el año 1959, este parque fue remodelado por el ing. Joaquín Canaán, por orden del mismo presidente Trujillo y se levantó el Auditorium, donde automáticamente quedó anulada la piscina convirtiéndose esta en cancha para la práctica Voleibol y Baloncesto, con gradas rústicas construidas a todo el alrededor, con un espacio físico de alojamiento al público de tres mil quinientas personas aproximadamente, y la pista de patinaje pasó a ser cancha de tenis. Por la parte interna debajo de las gradas, se habilitaron dos gimnasios con sus respectivos camerinos con pasarelas que se comunicaban entre si, una puerta principal y dos inmensas puertas laterales.
Estos gimnasios rendían un gran servicio a la juventud dominicana ya que este Auditorium fue escogido como escenario para exhibición del Boxeo, Lucha Olímpica, Kárate, Judo y presentación de la Lucha Libre.
En el año 1961, después de la desaparición de Rafael Leonidas Trujillo, la instalación deportiva recibió el cambio de nombre para hacerle justo honor al reconocido educador, periodista y escritor: Eugenio María de Hostos, pasando así a la administración de la entonces Dirección General de Deportes.
En esta instalación deportiva se destacaron grandes estrellas tales como: en el Voleibol Margarita González, Mario Crispín (Marito), Alfonso Peña entre otros. Allí también surgió el Baloncesto Superior 1972 con el aliento de ese gran deportista ido a destiempo, el profesor Virgilio Travieso Soto, inmortal del deporte dominicano.
Transcurrido un período de casi ocho años en estado de abandono, porque el gobierno del Dr. Joaquín Balaguer nunca se preocupó por acondicionar de nuevo este antiguo recinto deportivo, por la ubicación geográfica y el gran papel que desempeñó en la revolución de abril del 65 el Sector de Ciudad Nueva; fue en el año 1974 cuando nuevamente lo acondicionaron, en el país celebrarían los XII Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Más tarde, en el año 1978, por orden del Presidente Don Antonio Guzmán Fernández, y el entonces secretario de Estado de Deportes, licenciado y profesor Jesús de la Rosa y bajo la administración del Señor Luis Porfirio Díaz, se rehabilitó de nuevo por el Ing. Ervido Creáles haciéndolo funcional, debido a que nuevamente se encontraba en estado precario, surgiendo así de nuevo la práctica de Kárate, Lucha, Boxeo, Baloncesto, Voleibol y Levantamiento de Pesas. Fue entonces abierto a todos los clubes, asociaciones y público en general, siguiendo así la política de llevar el mensaje del deporte gratis a las masas, durante el gobierno de Don Antonio Guzmán Fernández.
El núcleo deportivo y en especial de Ciudad Nueva, sueña con que el actual Ministro de Deportes Felipe Payano, junto al presidente Leonel Fernández Reyna, así como al síndico Roberto Salcedo, haga realidad el mayor deseo de los Jóvenes deportistas, la remodelación de tan añorada Instalación deportiva, Auditorium Eugenio María de Hostos, para ellos poder decir el slogans que reza así, ¡Cuerpo Sano, Mente Sana!.
