Bloomberg News.-El Partido Popular del presidente  Mariano Rajoy tiene 862 funcionarios electos en toda España en los niveles regional, nacional y europeo.

Sólo uno ha cuestionado al presidente con motivo de las acusaciones de que recibió pagos ilegales en efectivo antes de acceder a su cargo en 2011.

Alejo Vidal-Quadras, legislador del PP en el Parlamento Europeo, dice que las desmentidas de Rajoy no convencen a los votantes y debilitan la posición del partido.

El disidente, un físico nuclear de 68 años, sostiene que otros comparten su punto de vista pero están demasiado acobardados como para acompañarlo.

“El partido actúa como si esto fuera Corea del Norte”, dijo Vidal-Quadras en entrevista telefónica. “Nadie se atreve a levantar la voz porque la dirigencia controla las listas electorales”.

El poder de Rajoy se basa en que controla qué candidatos tienen prioridad para acceder a una banca conforme a la forma de votación proporcional de España. Los detractores que hablan públicamente corren el riesgo de sumarse a las filas de los 6 millones de desempleados del país cuando lleguen las próximas elecciones.

Para España, el resultado podría ser la estabilidad de las políticas frente a una creciente indignación popular en tanto el primer ministro cumple los restantes dos años de su mandato.

Rajoy, que niega las acusaciones de haber cometido incorrecciones, se presentará en el parlamento español para hablar sobre este tema el 1º de agosto. Una portavoz del primer ministro no accedió a formular declaraciones cuando Bloomberg la contactó.

Los inversores apuestan a que el premier será capaz de mantener su programa de políticas económicas en marcha aun cuando su índice de popularidad caiga. El rendimiento de la deuda del país a diez años se ubicó en torno al 4,7 por ciento en julio cuando el primer ministro fue abofeteado.

Fondo de reserva

El diario “El Mundo” inauguró una nueva fase del escándalo el 9 de julio cuando informó que Rajoy recibió pagos ilegales en dinero de un fondo de reserva del partido mientras fue ministro del gobierno entre 1997 y 1999.

El rotativo prosiguió con el tema el 14 de julio al publicar mensajes de texto que, según aseguró, habían intercambiado Rajoy y el extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas, que habría estado a cargo de distribuir los pagos.

A muchos miembros rasos del partido les preocupa que la estrategia de Rajoy de ignorar el tema de la corrupción todo lo posible -es sabido que se niega a pronunciar el nombre de Bárcenas- debilite las posibilidades electorales del partido, dijo Vidal-Quadras.

El científico catalán fue miembro del comité ejecutivo nacional del PP durante veinte años antes de que Rajoy lo sacara del panel el año pasado.