Cleveland.-El dominicano Carlos Santana tiene suficientes razones para declararse como un enamorado de los Indios de Cleveland.

Santana llegó a los Indios en 2008 cuando fue canjeado desde los Dodgers de los Ángeles, hizo su debut en grandes ligas con Cleveland en 2010. “.Cleveland significa para mí lo máximo. Gracias a Dios me han dado la oportunidad de yo jugar en Grandes Ligas; fueron ellos que me abrieron las puertas y todavía sigo aquí”, dijo Santana.

Añadió que es algo que significa mucho porque esta ciudad se está convirtiendo en una ciudad de más deportes ya con el equipo de los Cavaliers y los Cleveland Browns, y con los Cleveland Indians.

“Hay algo que se nos refleja, un reflejo para nosotros, o sea para que la gente nos siga apoyando y seguir triunfando. Creo que Cleveland para mí ha sido lo máximo.

Cleveland tiene buenas personas, la gente siempre está (apoyando) a uno; yo le agradezco mucho eso”, resaltó el dominicano.

Familiaridad

Santana ha convertido a l niño Niko Lanzarotta miembro de su familia.

Niko es un niño que tiene problemas en su pierna y es algo que le llena mucho el corazón, que siempre trata de ponerlo feliz.

“Lo conocí un día que lo vi y me llamó y yo le regalé una pelota y él me dijo a mí que si yo le podía firmar.

Él me preguntó que si yo podía dar un jonrón entonces yo le dije, ‘si me das un abrazo.’ Y él me dio un abrazo y entonces en el turno al bate yo di jonrón”, dijo Santana.

Entonces, de ahí paso a ser un show para los fanáticos pero para Santana fue algo de corazón que no estaba en su mente, nunca.

“Siempre, cada vez que lo veo lo hago con mucho amor y respeto. Le doy un abrazo, le doy amor y cariño, y Niko ahora es mi mejor amigo en Cleveland.

Hace dos semanas tuvo una operación y yo estuve orando por él y gracias a Dios todo salió bien”, sostuvo Carlos.