Santo Domingo. — Las autoridades judiciales dominicanas abrieron la tercera investigación en lo que va del año sobre muertes en clínicas estéticas, luego del fallecimiento de una mujer que viajó de Estados Unidos para someterse a una liposucción.
La fiscalía de Santo Domingo cerró temporalmente la Clínica de Cirugía Plástica Dr. Edgar Contreras para investigar las circunstancias en las que Sharlene Cedeño murió el 23 de abril. La mujer de 23 años había llegado a República Dominicana dos días antes.
La clínica informó un día después en un comunicado que Cedeño sufrió un “laringoespasmo”. El forense aún no ha rendido el informe de la autopsia.
Yeni Reynoso, fiscal de la capital, explicó en su cuenta en Twitter que las autoridades ordenaron el cierre de la clínica para realizar su investigación y debido a los antecedentes del propietario del centro de salud, Edgar Contreras, quien ya ha sido demandado en otras ocasiones.
Recordó que Contreras está “vinculado a otros casos indagados” por la fiscalía. Tres mujeres demandaron al médico en 2014 y sus casos aún están bajo investigación.
El quirófano de la clínica ya había sido cerrado temporalmente en junio de ese año por el Ministerio de Salud. De forma previa, la modelo puertorriqueña Ivette Citrón sufrió una grave infección en los glúteos tras ser operada por Contreras en el 2000.
Con la muerte de Cedeño suman cuatro las mujeres que han fallecido en lo que va del año tras realizarse cirugías plásticas en República Dominicana.
La fiscalía de la ciudad de Santiago, 150 kilómetros al norte de la capital, cerró en febrero el Instituto de Adelgazamiento, Estética del Cuerpo y Ginecología tras la muerte de dos mujeres. El propietario de esa clínica, Oscar Polanco, está detenido.
A finales de febrero, la fiscalía de Santo Domingo abrió una investigación por la muerte de la estadounidense Venus O’Neill, de 35 años y procedente de Hawaii, quien pereció tras someterse a una liposucción en una de las clínicas estéticas más reconocidas de Santo Domingo.
República Dominicana se ha convertido en los últimos años en destino de mujeres que viajan de Estados Unidos y Sudamérica en busca de cirugías plásticas más económicas.
Las autoridades sanitarias estadounidenses han emitido varias alertas debido a los frecuentes casos de infecciones e incluso muertes de mujeres tras operarse en algunas clínicas estéticas dominicanas.
