Una refrescante brisa acompaña la llegada del 2015. La PUCMM tiene un nuevo rector después de que el saliente pasara mucho más de cuatro décadas en el cargo; el CONEP estrena nuevo liderazgo; el Grupo SID traspasa la presidencia a una joven e inteligente mujer.

La universidad católica, el principal gremio empresarial y una de los grupos industriales más importantes del país inician el año con algo muy raro en nuestro país: nuevos dirigentes que asumen sin traumáticos rompimientos con el pasado, sino más bien para continuar lo bien hecho y en lo posible mejorarlo.

Este tipo de transición quizás debería ocurrir también en otras instancias, como por ejemplo los partidos políticos.

El PLD, por ejemplo, tiene líderes jóvenes que efectivamente poseen seguidores (votos) como son el Presidente Medina y Leonel Fernández; pero en su comité político hay dinosaurios que no sacan una gata a orinar. La política partidista exige modernizarse con más democracia interna.