“Día por día”

“Día por día”

“Día por día”

La brecha entre pobres y ricos, cada vez más ancha y profunda, parece ser una de las peores maldiciones de la era contemporánea. Nunca antes hubo tanta riqueza en tan pocas manos ni fue la pobreza, ante lo primero, tan afrentosa.

Claro que un pobre hoy es mucho menos pobre que uno de cualquier época anterior, pero dado que todo es relativo, también podría decirse que ser pobre nunca significó una distancia tan enorme desde ese estado carenciado hasta la riqueza.

Quizás por eso me ha provocado cierta náusea ver un anuncio de un establecimiento del East Side de Manhattan cuyo lema es “resolver problemas de la clase alta, desde 1912”. No es un consultorio psiquiátrico ni un banco de inversiones, sino una tienda de regalos.

Ofrece una bacinilla “fabricada para el conde de Warrington” en la primera mitad del siglo XVIII.

Su precio es US$125,000.00. ¿Aguantará su orina pruebas de laboratorio?



José Báez Guerrero

Abogado, periodista y escritor dominicano.

Etiquetas