¿Cómo Ramírez, siendo tan pequeño, es una verdadera estrella en el plato?

José Ramírez. AP

NUEVA YORK. – Hay solo cuatro peloteros de Grandes Ligas con un OPS de más de 1.000. Los cuatro están en la Liga Americana, y los cuatro fueron titulares en el Juego de Estrellas.

El primero es Mike Trout… creo que han oído hablar de él. Y todos conocen a Mookie Betts, el estelar jardinero derecho titular de Boston. El tercero es el excepcional bateador designado J.D. Martínez, la mejor adquisición en la agencia libre pasada, quien se sigue ganando cada centavo de su lucrativo contrato con los Medias Rojas.

¿Quién es el cuarto? José Ramírez, el antesalista de los Indios, cuyos números siguen llamando la atención rápidamente, mereciendo el respeto de sus compañeros de equipo y los votos de los fanáticos.

Una sorpresa colosal

La realidad es que el hecho que Ramírez esté ocupando un lugar entre los mejores toleteros de todo el béisbol es algo que nadie esperaba, que no se predijo y que no fue previsto. Porque desde que comenzó a soñar con ser pelotero profesional a los 15 años a Ramírez solo le cerraban las puertas.

En aquel entonces, en 2008, a pesar de destacarse como uno de los mejores jóvenes jugadores en la Liga Dominicana, Ramírez siempre oía frases como “es sólo un jugador de relleno”, “es muy pequeño” y la que le molestaba más que ninguna otra: “nunca será una estrella”.

Ramírez creció en Baní, conocida por sus plátanos, su café y por ser la ciudad natal de Miguel Tejada. Creció soñando ser como un excepcional toletero también de apellido Ramírez, Manny Ramírez, pero tuvo que conformarse con el apodo de “Mini Me” debido a su pequeño tamaño.

Conocía sus limitaciones

“Sabía que iba a ser difícil buscar firma, porque tú sabes que en este negocio esos ‘scouts’ andan buscando siempre un Mike Trout, un Bryce Harper. O sea, gente fuerte. Me imagino que a José Altuve le pasó eso mismo. Me imagino que nadie confió en Altuve que iba a ser así. A veces el tamaño de uno, el cuerpo de uno, no llama la atención ni nada y nadie confía en uno”, declaró Ramírez.

Soto lo apoyó siempre

“Yo siempre sobresalía, pero nadie creía en mí”, agregó. “El entrenador mío (en República Dominicana), Enrique Soto, él siempre me ha apoyado. Siempre me decía, ‘Tú es el mejor pelotero que hay aquí, lo que pasa es que nadie sabe de esto”.

“Había peloteros buscando firma por millones; muchachos que van con estampa grande que valen mucho dinero”, agregó. “Entonces Enrique Soto le dijo al mismo Ramón Peña (el director de cazatalentos en Latinoamérica para los Indios de Cleveland de 2009 a 2016), ‘Tú le quieres dar $2 millones a estos muchachos y no le quieres dar $200 mil a José Ramírez, que ese es el mejor pelotero y el que te va hacer Grandes Ligas bien rápido’.

Negociaron

Entonces Ramón dijo ‘No, yo no te le puedo dar más de $50 mil dólares’. Al otro día que me firmó, Ramón Peña me dijo “¡Enrique no sabe lo que hizo conmigo!”.

Incluso después de firmar, a Ramírez no se le hizo fácil, a pesar de siempre ser uno de los mejores bateadores, y de los más jóvenes, en todos los niveles de ligas menores. Al medir solo 5 pies y 9 pulgadas, su estatura siempre fue vista como un impedimento. Pero después de pasar la temporada 2013 en Doble A dividiendo tiempo entre el campocorto y segunda y tercera base, a los 20 años se ganó tomarse su primera taza de café durante la expansión de planteles de Grandes Ligas en septiembre. “No voy a mencionar nombres, pero hay gente en esta organización que me dijeron a mí, ‘Aquí nosotros no te vamos a subir de liga porque tú no estás preparado’”, alegó Ramírez.

En trabajo

“Yo me olvidaba de eso y seguía trabajando duro. Con mi actitud por dentro; yo nunca le falté respeto. Yo siempre decía que yo voy a demostrar”.

Se ganó su regreso a las mayores durante la segunda mitad de la campaña 2014, con solo 21 años, pero tuvo problemas para quedarse en 2015. Pero desde que regresó a Grandes Ligas para quedarse en agosto de 2015, no ha hecho otra cosa que batear.

Ramírez registró un OPS (promedio de embasarse + slugging) de .775 por el resto de la temporada 2015, un OPS de .825 con 60 extrabases en 2016, y alcanzó un excepcional OPS de .957 el año pasado, cuando terminó tercero en la votación para el JMV de la LA.

No lo subestime

El dirigente de los Indios, Tito Francona, es el primero en destacar que si subestimas a “Josie”, lo haces bajo tu propio riesgo.

“Josie se formó él mismo”, explicó Francona. “Cuando subió por primera vez tuvimos que bajarlo a ligas menores dos veces porque estaba teniendo dificultades. Sabíamos que iba a ser un buen utility porque era versátil y podía correr un poco. Pero una vez empezó a irle bien… de veras que es increíble cuando alguien empieza a confiar en sí mismo y empieza a pensar ‘merezco estar aquí’. Entonces, de repente, simplemente no sólo sientes que perteneces, empiezas a pensar ‘podría prosperar aquí’”.

Hay que contar con él

“Es un pelotero con el que puedes ganar. Es un jugador que puede ser el ancla de un equipo y puedes ganar con él. Es un pelotero ganador”.

Así es como el pelotero que era demasiado pequeño para tomarlo en serio, es ahora demasiado grande para que los Indios puedan ganar sin él. Y al combinarse con el estelar campocorto Francisco Lindor, los Indios pueden medirse golpe a golpe con alineaciones opulentas y repletas de estrellas como las de Nueva York y Boston, con dos jugadores franquicia que seguirán juntos por los próximos años.

Contrato de 5 años

Ramírez vestirá el uniforme de los Indios hasta 2023, tras firmar un contrato de cinco años con dos opciones del equipo. Y bien ha valido la inversión. El coach de bateo Ty Van Burkleo considera que Ramírez posee una excepcional coordinación de vista y manos, y una de las mejores habilidades de reconocer lanzamientos en todo el béisbol. “Es realmente un buen bateador natural”, acotó Van Burkleo. “Y me imagino que tiene muy buena visión.

Mente enfocada

Es un atleta con muy buen tiempo de contracción y reacción. Su mente es muy enfocada y sabe mantener la calma y a la vez no le teme a nada. Es la combinación perfecta para ser un gran bateador de Grandes Ligas”. Esa combinación ha ayudado a Ramírez a cumplir en casi cualquier situación que los Indios lo necesiten, creando un problema que sus rivales no han logrado resolver. Y en la pelota de hoy en día, donde dominan los relevistas y se busca siempre la ventaja de la especialización uno a uno, la habilidad de Ramírez puede ser aún más importante.

Buen bateador

“Es tan buen bateador que los relevistas, que tienen tremendo arsenal, no van a superar a un bateador con sus habilidades, porque realmente puede batear cualquier cosa”, continuó el entrenador. “Creo que el hecho de que no hace swing a picheos fuera de la zona a menudo es uno de sus puntos fuertes. También es un bateador muy inteligente”.

Edwin Encarnación, uno de los toleteros más respetados de su generación, es uno de los que más se beneficia de las ejemplares habilidades de reconocimiento de picheos de Ramírez. Encarnación explicó que ese alto nivel de reconocimiento de picheos va más de acuerdo con jugadores con mucha más experiencia en las mayores. “Yo creo que por eso a Ramírez hay que quitársele el sombrero, porque lo ha hecho en poco tiempo”, dijo Encarnación.

10 %

Es apenas.

El promedio de ponches que ostenta el dominicano, en contra de lanzadores de ambas manos, un promedio muy bueno.

2015

Para quedarse.

Ramírez se estableció en 2015 y de ahí en adelante es un jugador respetado por todos.