SANTO DOMINGO.-  Fue apresado ayer mientras intentaba salir del país el cirujano plástico Johan Manuel Tapia Bueno, el médico que practicó una cirugía  estética a Hermes Meccariello.
En horas de la mañana  la Fiscalía del Distrito Nacional y Salud Pública le cerrón  la clínica Brasil por denuncias de mala práctica médica y  no tener permiso legal para operar.

La fiscal adjunta del Distrito Nacional Anibelka Guzmán, informó que Tapia Bueno fue detenido  por inspectores de Migración en el Aeropuerto Internacional de Las Américas cuando éste intentó abordar un vuelo que lo llevaría a Estados Unidos.

Sin embargo, Tapia Bueno aseguró que se presentó voluntariamente a la Fiscalía, donde fue interrogado y dejado bajo arresto.

El fiscal del Distrito Nacional, Alejandro Moscoso Segarra, dijo que en las próximas horas podría pedir medida de coerción contra el galeno, quien permanece en la celda de la cuarta planta del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva.

Juan Tomás Vargas, uno de los  abogados del médico, aseguró que éste  compareció ante el fiscal  Moscoso Segarra por voluntad propia para colaborar con las investigaciones.

Tres mujeres que habían sido intervenidas por Tapia Bueno acudieron a la Fiscalía para formalizar querellas por supuesta mala práctica médica.

 Bienvenida Hernández, una de las afectadas, dijo que  contempla interponer una demanda contra  Tapia Bueno, aunque dijo que el daño moral no se puede “resarcir”.  Mientras que Miguelina   Escobosa, otra de las víctimas, dijo que siente “terror al ver al médico”, tras indicar que lo único que quiere es justicia por el daño que le provocó.

La presentadora de televisión Hermes Mecariello ha tenido que ser hospitalizada y operada en dos ocasiones por infecciones tras realizarse una cirugía estética.Allanamiento matinal

Cuando la Fiscalía y Salud Pública acudieron a  la clínica Brasil para allanar el lugar, una de las secretarias de la odontóloga que tiene su consultorio en el referido centro, no quiso abrir la puerta a los representantes de ambos organismos, lo que provocó que la rompieran  para penetrar al establecimiento.

Allí incautaron   equipos,  detergentes,  miel de abeja, pegamento (coquí), grapas, formol, ubre de vaca, insecticida, agua oxigenada y otros productos.

Salud Pública dispuso el cierre del centro que según las autoridades funcionaba sin los permisos correspondientes. Los abogados del cirujano plástico  estuvieron en el lugar de los hechos. Jorge Morillo y Gregory Gómez, explicaron que pasaban por el lugar por “coincidencia” y que se presentaron a ver el aparataje.