Nueva York.-Si vas a dejar la universidad, más vale que te busques un trabajo. ¡Ahora!” – Joe Bird, padre de Larry (Bird).

El joven, nativo de French Lick, tomó un trabajo para esa municipalidad  haciendo todo tipo de cosas: talaba árboles, recolectaba basura en un camión, cortaba el césped, pintaba letreros. Incluso llegó a trabajar para una empresa que entregaba casas rodantes.

Larry Bird, de sólo 18 años, promedió 30.6 puntos y 20.5 rebotes en 1974, defendiendo la camiseta de Springs Valley High School. French Lick, un pequeño pueblo ubicado en el condado de Orange, Indiana, cobijó los primeros años de vida de Larry, cuarto de seis hijos de una familia de clase baja.

Su madre Georgia, soporte de la familia, trabajaba como mesera y  tenía que emplearse en dos ocupaciones al mismo tiempo para poder afrontar los gastos.

Su padre Joe, trabajador ocasional que sufría problemas de alcoholismo, se empleó en Kimball Piano Factory como carpintero.

Nómadas

Los Bird eran una familia nómada en French Lick: alquilaron 17 casas en 18 años antes de comprar su propiedad en Washington Street,   El básquetbol fue siempre una vía de escape para Larry.

Dentro de una cancha, los problemas dejaban de parecer relevantes y todo pasaba a ser un juego.

Era la plataforma donde él mandaba y el resto aplicaba según sus directivas.

La producción de Bird en el básquetbol colegial sedujo a varias universidades del país, interesadas en contar con los servicios de esa gema conocida como “El pueblerino de French Lick”.

Bird tenía muchos problemas de timidez en su infancia. Odiaba las grandes aglomeraciones y sólo abría la boca para decir lo necesario.

Entonces  llegó Bobby Knight para ofrecerle un lugar en la Universidad de Indiana.

Aquí no había concesiones ni tratos preferenciales. Todo había que ganárselo con trabajo.

Y eso fue lo que sedujo a Bird, que posteriormente se convirtió en una celebridad, primero para Indiana y luego para los Celtics de Boston.