Basilea III

Basilea III

Basilea III

A raíz de la crisis financiera que sacudió el país en el periodo 2003-2004, y el subsecuente fiasco bancario, el país utilizó como unos de los remedios, la adopción de unas normas bancarias denominadas Basilea II. Estas surgieron en el 2004 cuando el comité de supervisión del Banco de Pagos Internacionales de Basilea, organismo supra regional, acordó establecer ciertas regulaciones para sus bancos miembros, que exigían bases de capitales ampliados y reservas estandarizadas sobre los riesgos que asumían.

A este conjunto, llamado Basilea II, se le culpó por todas las limitaciones al crédito en el país. Fueron un culpable que sin embargo, protegió al país de la crisis financiera de los G-20, o países más desarrollados, que sacude al mundo desde hace una par de años.

Precisamente por estas convulsiones en los mercados, que comenzaron en Estados Unidos con el descontrol absoluto de instrumentos sin valor, como las llamadas hipotecas basuras, y que culmina con las crisis de los países denominados PIGS (Portugal, Irlanda, Grecia, España), el propio comité de supervisión del Banco de Pagos  Internacionales viene trabajando en un nuevo conjunto de normas.

En esta ocasión, las normas persiguen cubrir una mayor uniformidad en la definición en los niveles mínimos de capital base, homogenización de los distintos tipos de capital, exigencias de una capital de mayor calidad, y una vinculación más directa entre la solvencia y los perfiles de riesgo.

En estos tiempos en que la banca que opera en el país exhibe niveles record de utilidades, es aconsejable aprovechar esos volúmenes y anticiparse a los requerimientos de Basilea III, como desde ya se le llama al conjunto de nuevas normas por venir, y que nuestras instituciones bancarias puedan seguir mostrando los niveles de solidez y prudencia que le permitieron franquear con éxito esta última crisis de los países más desarrollados.



Etiquetas