Arzobispo descentraliza dirección de arquidiócesis Santo Domingo

Santo Domingo.-La arquidiócesis de Santo Domingo será dividida en cuatro unidades territoriales denominadas vicarías episcopales, en adición al Distrito Nacional, lo que permitirá descentralizar los trabajos pastorales y administrativos de la Iglesia católica en esta demarcación.

Las vicarías episcopales son dirigidas por sacerdotes u obispos auxiliares designados por el obispo ordinario, en este caso el arzobispo de Santo Domingo, y puede cambiarlo cuando él considere.

El Derecho Canónico establece que el Vicario Episcopal que no sea obispo auxiliar debe ser nombrado tan solo para un cierto tiempo, que se determinará en el mismo acto de su designación.

En estos territorios, el Vicario Episcopal tiene prácticamente todas las funciones del obispo ordinario (arzobispo), salvo las que este se haya reservado para sí o para el Vicario General.

Las vicarías episcopales creadas por el arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria Acosta, son la Vicaría Este (Santo Domingo Este, San Luis, Guerra y Boca Chica), con una población de 1,291,516 habitantes y 64 parroquias; Vicaría Norte (el municipio Santo Domingo Norte, que incluye los sectores Villa Mella, Sabana Perdida y Guaricano, Guanuma), con una población de 602,423 y 31 parroquias; Vicaría Oeste (los municipios Santo Domingo Oeste, Los Alcarrizos y Pedro Brand), con una población de 808,089 y 31 parroquias, y Vicaría de Monte Plata (los municipios Monte Plata, Sabana Grande de Boyá, Bayaguana, Yamasá y Peralvillo), con una población de 189,166 y doce parroquias.

El Distrito Nacional no será Vicaría Episcopal por entenderse innecesario, ya que aquí está la sede del arzobispo de Santo Domingo y de la curia de la arquidiócesis.

Proyección a futuro

El propio arzobispo Ozoria, durante una visita realizada al alcalde de Santo Domingo Este, Alfredo Martínez, adelantó que la creación de la Vicaría Este es un paso previo a la posible creación de una nueva diócesis en esa zona.

La división de la arquidiócesis de Santo Domingo está planeada desde hace unos diez años, pero todavía no se ha ejecutado.

La erección de una nueva diócesis es facultativo del Papa, pero las vicarías episcopales se pueden crear de manera administrativa por el obispo o arzobispo en la cantidad que estime conveniente.

El Derecho Canónico, que es el que rige a la Iglesia católica, establece que el Vicario Episcopal tiene “la potestad ejecutiva que corresponde por derecho al obispo diocesano (arquidiocesano en este caso), para realizar cualquier tipo de actos administrativos, exceptuados, sin embargo, aquellos que el obispo se hubiera reservado o que, según el derecho, requiere mandato especial del obispo”.

El arzobispo de Santo Domingo puede poner al frente de una Vicaría Episcopal a un sacerdote o a un obispo auxiliar, pues los requisitos que establece el Derecho Canónico para ocupar esas funciones son “ser sacerdote de edad no inferior a treinta años, doctores o licenciados en Derecho Canónico o en Teología o al menos verdaderamente expertos en estas materias, y dotados de sana doctrina, honradez, prudencia y experiencia en la gestión de asuntos”.

El día de su toma de posesión Ozoria nombró a Abraham Apolinario como Vicario General, a monseñor Lorenzo Vargas como Vicario de Pastoral y al padre Geraldo Ramírez como Canciller.