MADRID, España. – En conversación con dirigentes europeos, el jefe de gobierno español, Mariano Rajoy, defendió este lunes su determinación a la hora de impedir el reférendum de independencia en Cataluña prohibido por la justicia del domingo, informó Moncloa en un comunicado.

Moncloa hizo el anuncio luego de que la Unión Europea pidiera a Madrid y Barcelona pasar «de la confrontación al diálogo» y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, urgiera a Rajoy a evitar un nuevo «uso de la fuerza», luego de las violentas cargas policiales durante el referéndum.

Con Tusk, con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y con el del Parlamento europeo, Antonio Tajani, Rajoy conversó para explicarles «el fracaso del referéndum» del domingo, indicó el comunicado.

También se comunicó con el presidente del Consejo de la Unión Europea, el primer ministro de Estonia, Jüri Ratas, y con el presidente francés Emmanuelle Macron.

Frente a todos ellos, «ha subrayado que la determinación del Gobierno a la hora de impedir el referéndum ilegal contribuye a mantener la estabilidad y la democracia en el conjunto de la Unión» Europea, afirmó el texto.

Los líderes separatistas catalanes organizaron el referéndum de autodeterminación el domingo, pese a su prohibición de la justicia. Para intentar impedirlo, policías nacionales y guardias civiles recurrieron a porras, patadas, empujones y balines (pelotas) de goma contra manifestantes y entraron por la fuerza en colegios para requisar urnas y papeletas.

Los independentistas amenazan con una declaración unilateral de independencia de la región del noroeste de España de 7,5 millones de habitantes y que representa un 19% del PIB de España, ante lo que Rajoy recibió este lunes en Moncloa al líder del partido socialista PSOE y al de los centristas de Ciudadanos.

Agradeciendo «la lealtad que ambos han mostrado a nuestro orden constitucional», Rajoy se comprometió a «estudiar con responsabilidad y lealtad» sus propuestas.

Tras la reunión, el líder socialista Pedro Sánchez instó a Rajoy a abrir una negociación con el presidente catalán, Carles Puigdemont, mientras que el jefe de Ciudadanos, Albert Rivera, le pidió una suspensión parcial del autogobierno regional para convocar nuevas elecciones en Cataluña.