Año escolar y saneamiento

Año escolar y saneamiento

Año escolar y saneamiento

Estamos a días de iniciar lo que podría ser un año escolar que marque un antes y un después en nuestro sistema educativo, en el que finalmente pudieran empezarse a sentirse los frutos de la inversión del cuatro po ciento del producto interno bruto, el pacto educativo y una planificación adecuada.

Pero también pudiera ser un año crítico si actores importantes del sistema no actúan al nivel que la sociedad espera de ellos.

Se esperaba un respaldo militante y entusiasta de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) por la decisión del Ministerio de Educación de retirar de nómina a los que cobraban un salario como maestros sin estar ejerciendo ninguna función.

Nadie más que un maestro debe exigir que quien no trabaje no cobre. Incluso, esa es parte de la enseñanza integral que se dice debe darse en el aula.

Voceros de la ADP han intentado invalidar el proceso de saneamiento de la nómina con el caso de los más de mil maestros que están para pensión y que fueron identificados por el propio Ministerio para pasarlos a la nómina que les corresponde.

La ADP jugó un papel protagónico en la conquista del cuatro por ciento del PIB para la educación preuniversitaria. Sus dirigentes de ahora tienen la responsabilidad de no empañarlo obstaculizando los procesos de saneamiento financiero.

Es preciso ahora apoyar que el saneamiento de la nómina se lleve a cabo en las áreas administrativas y en los programas descentralizados.

El maestro debe ser también un guía moral y como tal deben actuar sus representantes.



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