Hay, al menos, tres ministerios que, de un tiempo a esta parte, vienen a jugar un papel de impresionantes alcancías que administra el Gobierno. Se trata de los ministerios de Hacienda, Obras Públicas y Comunicaciones y el de Industria y Comercio. Todo lo que recaudan se convierte en ahorro que las autoridades invierten a discreción.

En el caso del Ministerio de Industria y Comercio, autoriza constantemente alzas en el precio del gas licuado de petróleo, el gasoil regular, premium y óptimo y las gasolinas . Eso se produce los viernes y rige durante toda la semana.

Eso quiere decir que de acuerdo a la decisión de Industria y Comercio el precio de los combustibles se mantiene estable, y también oscila siempre hacia arriba. ¿Y qué sucede cuando no hay alteración del precio? Eso no se traduce, bajo ningún concepto, en ahorro para los compradores.

Todo lo contrario. Alerta que a partir de ese precio congelado se producirán nuevas alzas en las próximas semanas.

No importa el precio a que se venda hoy el galón de gasolina. Haya o no un incremento. Los precios de los combustibles inciden de manera sensible en el poder adquisitivo de todos los dominicanos, ya que en ese orden se mueven todos los precios que están sujetos a esta variable.

Incluido el pasaje del transporte público. Ese ajuste, por sí solo, agudiza más el asfixiante e incontrolable proceso de inflación. Hay que ponerle coto a esta situación; y cuanto antes mejor.