Los pueblos del mundo, reunidos en el año 1993 en la Asamblea General de las Naciones de Unidas, aprobaron el día 22 de Marzo de cada año, como Día Mundial del Agua.

El propósito de esta Declaración es llamar la atención a todos para que se asignen los recursos que garanticen:
a) El uso pleno del derecho humano al agua y al saneamiento: en las viviendas, las escuelas, los hospitales
b) Agua para sostener la biodiversidad

c) El aprovechamiento del agua para la producción agrícola, energía, el desarrollo del turismo y actividades recreativas; la producción industrial; agua en la minería responsable y todos los usos posibles
Hoy es un día propicio para decir que el líquido vital, agua, debemos protegerlo de la contaminación, y no desperdiciarlo, pues el agua dulce en el planeta es poca, que debemos cumplir con nuestras responsabilidades de buenos ciudadanos y cumplir con el pago de estos servicios cuando se prestan adecuadamente.

El agua se formó en la tierra hace más de 4,000 millones de años, y hasta la fecha, la cantidad de agua sigue siendo la misma, circulando continuamente en el Ciclo Hidrológico.

El Ciclo Hidrológico es el foco central de la hidrología y todos debemos conocerlo como un factor importante en el sostén de la vida y la economía.

En el Ciclo Hidrológico el sol es el motor de energía en longitudes de ondas corta que al llegar a la superficie del planeta ocasiona la evaporación del agua, en el mar y en la tierra.

El agua evaporada forma las nubes que almacenan el agua, y cuando este vapor de agua se condensa, se produce la precipitación en diferentes formas: lluvia, granizos, nieve, agua nieve y rocío.

La lluvia, al caer en forma de gotas de agua, puede llegar a tener un diámetro de hasta 5 mm, con velocidad terminal de 4.02 m/seg, impactando los suelos, ocasionando un proceso erosivo que arrastra la riqueza de la capa vegetal.
La vegetación, al cubrir los suelos, los conserva y sirven para la producción de alimentos.

Los árboles no son productores de agua; pero sí tienen el rol de regular el agua para la formación de arroyos y ríos perennes e intermitentes.

Cuando el agua cae en la superficie de la tierra se produce un escurrimiento superficial, formando lagos, lagunas humedales; y una infiltración.

El agua infiltrada, una parte se almacena en los suelos, otra forma corrientes subsuperficiales, y otra forma los cuerpos de aguas subterráneas para finalmente llegar al mar.

El mar al recibir los arrastres procedentes de la tierra durante millones de años, es lo que ha provocado la salinidad del mar. El mar representa el mayor volumen de agua en el planeta. Hay quienes han planteado que nuestro planeta es el planeta del agua, más que de la tierra.

Hay más agua salada que agua dulce. Veamos el informe de la Unesco del año 1978, cuando establece que el 96.5 % de toda el agua del planeta es salada, ocupando un volumen de 1,338 millones de km3, renovándose por evaporación promedio de 505,000 km3/año en rango de 2550 a 3000 años o más.

El volumen total del agua en el planeta se completa con el 1,55 % de agua dulce y el 0,94 % de agua salada en lagos y aguas subterráneas saladas

Cada año el agua evaporada del mar es 458,000km3, almacenándose en las nubes 12,900 km3, los cuales se precipitan cada 8.2 días (12900/458000), siguiendo patrones y variabilidad regionales.

Desde la tierra, gracias a los árboles se transpiran y evaporan 72,000 km3, y los vientos transportan un flujo de vapor de agua, de 40,000 km3/año que ocasionan la precipitación sobre las tierras continentales e islas.

La precipitación sobre la superficie del agua de mar es de 458,000 km3/año y sobre la superficie terráquea es de 119,000 km3/año por el flujo transportado y la condensación de las nubes.

El agua dulce

El flujo de agua en los ríos, según la Ecología de Robert Smith, en el mundo entero es del orden de 40,000 km3 y según reporte de la Unesco es de 44,700 km3/año, con volumen de agua en ríos de 2,120 Km3. Estos datos, reflejan que el tiempo de permanencia del agua en los ríos es de aproximadamente de 15 a 22 días en su tránsito en la zona de tierra.

Las aguas subterráneas dulces, con tiempo de residencia comprendido entre 2 semanas y 10,000 años, representan 5 mil veces el volumen de agua en ríos, es decir 10,530,000 km3 de agua dulce subterránea /2,120 Km3 de agua en ríos.

*Por Roberto Castillo Tió