Muy lamentable el accidente ocurrido en el día de ayer en la carretera Higüey-Verón, en la provincia La Altagracia. Tenemos el reporte de 11 personas fallecidas y 77 heridas, pero todavía el número de víctimas y afectados no es definitivo.

Este hecho pone un crespón negro al país, y de manera particular enluta a las familias de las víctimas, pero al mismo tiempo debe servir como un indicio a las autoridades del área de prevención de accidentes.

Un indicio de que hay que mover fechas para adelantar operativos en avenidas y carreteras.

De hecho, con el anuncio de la entrega del bono navideño, llamado popularmente doble sueldo, habrá un gran congestionamiento en las principales calles y arterias comerciales de Santo Domingo e importantes ciudades del interior. Importa, en ese orden, actuar de acuerdo a lo que dicta el sentido común.

De manera que las autoridades deben ponerse en consonancia con lo que ya se está viendo.

Hay que reforzar las campañas preventivas, hay que imponer mayor carácter a la vigilancia en las calles y arterias comerciales, hay que empezar un plan de refuerzo en las avenidas y carreteras.

El accidente de Higüey-Verón disparó, de manera prematura, todas las alarmas. Las autoridades deben actuar sin pérdida de tiempo.