En el anterior artículo, hacíamos referencias como fue implementada la mediación familia en la República Dominicana a través del Poder Judicial y que a la fecha ha dado resultados exitosos y, además, fue reconocido por el Comité Científico del Congreso Mundial de Mediación como una experiencia exitosa global en el año 2015.

He estado involucrados en temas de cultura de paz, resolución alterna de conflictos y negociación por más de 25 años, a través de diversos actos y eventos realizados por grupos de la sociedad civil y la iglesia María Auxiliadora en la que empecé a conocer a San Francisco de Asís, autor de la oración de la paz, “Señor, haz de mí un instrumento de tu paz”.

Otros como medio de aprendizajes, fueron: Curso Resolución de Conflictos, Universidad Apec: Curso Cultura de Paz: habilidades y método de resolución de conflictos de 20 horas. Coordinación Diplomado en Mediación y Resolución de Conflictos; Participación Ciudadana, Universidad UAPA vía Casa Comunitaria de Justicia y Usaid. 14 febrero 2015. Curso Formación por Competencias, Centro de Capacitación Judicial para Centroamérica y el Caribe; Curso Evaluación por Competencias, Centro de Capacitación Judicial para Centroamérica y el Caribe; estos realizados con la Escuela Judicial de Costa y la República Dominicana.

Curso de Negociación y Resolución de Conflictos virtual impartido por la Universidad Valparaíso de Chile.
La formación básica y clave para desempeñar la función de persona mediadora, fue el impartido por la Fundación Libre en 125 horas y el de formación a Capacitadores en Mediación, por 60 horas. Cuyos gastos fueron cubiertos por la USAID.

En relación a la situación de violencia por lo que está atravesando la familia dominicana, principalmente las parejas, he realizado el diplomado Violencia Intrafamiliar: Abordaje Integral de los Sistemas Abusivos; PUCMM-Pacam-2008, 76 horas.

12 años en mediación para conocer internamente las intimidades de las personas, familias y vecindario; en donde estos bajo firma de confidencialidad, expresan sus angustias, tristezas, frustraciones y esperanza. De las cuales sale a relucir necesidades psicológicas, psiquiátricas y básicas. Pero lo más trascendental, las oportunidades que tienen las personas para llegar a un acuerdo, mutuamente consensuado por ellos y establecido por estos; sin que una tercera persona ajena a su conflicto, decidiera por ellas.

En 12 años, abrí las puertas a instituciones internacionales, dentro de la mismas esta el Movimiento Asturiano por la Paz (MASPAS), desde el cual hemos hecho sinergia para realizar dos seminarios internacionales de mediación en la República Dominicana, con el auspicio del Ayuntamiento de Gijón, he compartido experiencias con el cientista social y mediador internacional, Johan Galtung, el cual en el 2011 dejó impactado a más 500 personas (profesionales del derecho, trabajadores sociales, mediadores, estudiantes, ongs, empresarios, y dirigentes políticos u otros) a través de sus planteamientos sobre la conflictividad social, económica, militarista y opresión a los pueblos de escasos recursos. En ese evento, fueron celebrados los 5 años de fundación de los Centros de Mediación Familiar y su impacto en la sociedad.

Luego en el 2016, realizamos a través de MASPAZ, el segundo seminario internacional en el cual celebramos los 10 años del CEMEFA. Con recursos del Ayuntamiento de Gijón hicimos realidad que compartiera con las personas mediadoras y el público en general; dos personalidad legadas a la resolución de conflictos, como fueron: el magistrado Luis Campo y Ramón Alzate. El primero juez de familia en Asturias y el segundo, expertos en resolución de conflictos educativos. Además, realización de un diagnostico sobre la experiencia de mediación y sus desafíos en el porvenir. Fue publicado una relatoría, en la cual se reúnen los diversos puntos de vistas, tanto de las conferencias por los expertos, como las expuestas nacionales.

Para el 2017, continuamos reforzando la mediación y la cultura de paz en la nación dominicana. El proyecto aprobado abordo lo que siempre he deseado, la formación de personas servidoras judiciales como mediadoras con el objetivo de contar con un personal interno capacitado y entrenado para ocupar un puesto en la judicatura. Asimismo, un entrenamiento a las 12 mediadoras activas para garantizarle la certificación otorgada por la Escuela Judicial de Costa Rica.

Todo lo anterior, nos llena de regocijo y felicidad, saber que la República Dominicana esta trillando caminos hacia la paz duradera. Una paz que solo es posible si la ciudadanía se empodera de su propia realidad y contexto.

La ciudadanía tiene un compromiso con sus hijos en hijas, familias, vecinos, compañeros y compañeras de trabajo y estudios. Hasta religioso, ya que el conflicto no tiene exento a ninguna agrupación humana.

La república dominicana se encamina a regularizar los métodos alternos de resolución de conflictos, a través de un anteproyecto de ley que cursa en el Congreso y que esperamos en Conflictos y Mediaciones que el mismo se haga realidad.

Las personas que ejercen la función de legisladores tienen un compromiso con la convivencia, tal como lo ha asumido en la ley Estrategia Nacional de Desarrollo (1-12); en donde la sociedad dominicana se compromete que para el 2030, tendríamos personas formadas en mediación en escuelas para esos fines y centros de mediación en todo el territorio nacional. A la fecha, solo el Poder Judicial y una organización de la sociedad civil ha hecho realidad dicho planteamiento.

Por ejercer, esta disciplina he recibido reconocimientos del Ayuntamiento del Distrito Nacional, Regional 15 del Ministerio de Educación (MINERD), Codonbosco, Caballeros de Colón, Unión de Ligas y Clubes María Auxiliadora y Juntas de vecinos. A todos, muchas gracias.